Un paseo por Soto de Luiña

¿Callejeamos? Hoy damos un paseo por el pueblo de Soto de Luiña. Son poco más de 2 km recorriendo los barrios.

Muchas veces decidimos alojarnos o comer en un lugar pero no conocemos el pueblo en el que estamos.

Desde el Hotel Casa Vieja del Sastre comenzamos a recorrer la calle principal del pueblo. Observamos la distribución de las casas, algunas de las cuales ya existían a finales del S. XIX. Éstas protegían la calzada de la antigua carretera transcantábrica asturiana.

Por esta carretera pasaron destino a Galicia personalidades como las de Juan XXIII o Graham Greene y personajes de la farándula como Raphael o los Brincos (todos ellos hicieron parada o fonda en Casa Rafaela, restaurante y fonda actualmente desaparecida).

Llegamos a la plaza Príncipe de Asturias dónde nos encontramos con los monumentos declarados Patrimonio de la Humanidad vinculados al Camino de Santiago: Iglesia de Santa María de Soto de Luiña y Hospital de Peregrinos. Descendemos por la escalera que pasa entre la Iglesia y la Casa Rectoral, antiguo hospital de peregrinos, para acceder a la fuente, manantial dónde se decidió levantar en 1608 la primera iglesia, de fábrica sencilla y pobre y cuyos gastos sufragaron los marineros y pobladores.

Cruzamos la carretera por el Pontico para coger el camino de la derecha «el Caleón» que nos llevará hasta el Barrio de Busfrío.

Bajamos por el camino a la izquierda hasta enlazar con la Caleina y subimos un poco para coger la Carretera N-632a, caminaremos por ella con cuidado unos 200 metros y giraremos a la izquierda tomando el camino de Ondina, pasaremos al lado de unos casas y cogeremos un camino de nuevo a la izquierda (tramo del Camino de Santiago) que nos lleva a Cachona. Continuamos por el camino y a la altura del Hotel Valle de las Luiñas tomamos la calle principal del pueblo.

Cuando llegamos al cruce de carreteras cogemos la carretera de la estación, pasamos al lado de el Castañedo y seguimos hacia arriba. Encontraremos a la izquierda una de las casas más antiguas del pueblo, con escudo de los Omaña, y un poco más arriba veremos una casa Indiana construida en la época en la que llego el tren a la localidad (años 50). A unos 100 metros tomamos el camino a la izquierda que nos lleva al Barrio del Otero. Aquí empieza el descenso hasta el pueblo. Cruzamos todo el Otero y antes de llegar a las últimas casas hay un camino muy estrecho a la izquierda (el Atajín) que si lo tomamos llegamos a mitad del pueblo para regresar al Hotel. Si seguimos de frente bajaremos a través del Castañedo y saldremos en frente de la Iglesia.

Para aquellos que 2,54 km son un corto paseo, esta ruta puede enlazar con la del Valle de las Luiñas y la de Prámaro.